Virus, virus y descanso.

Pues así han sido mis últimas dos semanas. Desde el Domingo me sentí cansado y descansé el lunes (como es usual en mi) y el Martes porque no podía con mi vida, Miércoles y los siguientes 8 días con supuestos virus y décimas de fiebre hasta que el jueves de semana santa en mi tercera visita al médico me recetan antibióticos, con los que a pesar de dejarme muy cansado mejoro. Como regalo me ha quedado una sinusitis que no me pueden tratar en una semana por que acabo de finalizar con un ciclo hace sólo tres días.

En definitiva que las semanas que iba a incrementar el volumen aprovechando las vacaciones... pues nada de nada. Lo único positivo fue que al estar tanto tiempo en casa he visto los mundiales de natación y a pesar de no aprender nada, y tengo margen de mejora, eh?; cada día me gusta más este segmento que nunca me había llamado la atención.

Hoy he nadado por la mañana y aunque me siento cansado por lo menos he echo algo, espero que esto sea el comienzo del camino que llegue en Klagenfurt pasando por Lisboa.

Aunque suene a raro me parece que una circustancia como esta es buena, y lo digo porque te hace plantearte la importancia de las cosas y valorarlas en su justa medida, generalmente no valoramos todo lo realmente importante y básico porque está ahí y aunque no lo parezca y sólo lo apreciemos cuando fañta.
Así que lo que me preocupaba la semana previa que era el cambio de la bici, ahora me preocupa cero patatero.

Salud y Felicidad para todos.